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lunes, 30 de mayo de 2016

La ruta PRO de los Panama Papers ------- Por Santiago O´Donnell









La ruta Pro de los Panama Papers arranca con el hallazgo de más de 30 empresas offshore con sede en paraísos fiscales bajo el control del dueño de un fondo de inversión investigado en la Argentina por lavado de dinero. Sigue por un grupo de empresas que se llaman Pro, como Pro-Enter, Pro-IDS, Pro Entertainment y Pro Entertainment Holdings. Pasa por la Productora Ideas de Sur del conductor y empresario Marcelo Tinelli en la calle Olleros, pasa también por la Bombonera de la Boca, y salpica a Andrés Ibarra, un ministro clave del Gabinete nacional e íntimo colaborador desde hace más de una década del presidente Mauricio Macri.

El fondo de inversión denunciado por lavado de dinero por la AFIP y luego por la Procelac (Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos) actualmente investigado por la Justicia Federal se llama Hope Funds. Su accionista principal y CEO es Enrique Blaksley. Su nombre figura en el centro de un entramado de más de 30 empresas offshore concentradas en Panamá y las Islas Vírgenes Británicas. Así surge de los documentos del estudio panameño Mossack Fonseca, que detectó y analizó Página/12 en el marco de la investigaciaón impulsada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung. Según las denuncias, Hope Funds no puede justificar el origen de sumas millonarias que ha invertido en distintas empresas porque muchos de sus inversores resultaron insolventes, no declararon y no podrían justificar el dinero que invirtieron. El año pasado, después de 18 allanamientos, Blaksley fue indagado por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado. La causa sigue abierta.

Hope Funds es un importante accionista de una empresa de marketing deportivo llamada Proenter. A partir del 2011, y hasta el año pasado, Proenter manejaba el merchandising del club Boca Juniors, primero a través de una empresa con ese nombre y después con otra llamada Ilmen. Ilmen tiene el mismo domicilio y los mismos directores que Proenter, pero distinta razón social. Mientras Proenter declara estar dedicada al mercadeo y la promoción de eventos y espectáculos, la razón social de Ilmen, según el boletín oficial de la ciudad, es la “comercialización de materiales de construcción”. Ese mismo año 2011 Hope Funds se convirtió en accionista de Proenter, participación que se extendió a Ilmen cuando ésta asumió los negocios con Boca. Blaksley, el CEO de Hope Funds, dijo al diario La Nación, en mayo de 2012, entrevistado por Carlos Masoni: “somo dueños del merchandising de Boca Juniors (todo menos la camiseta y la estática) y de la licencia de las escuelas de fútbol”. En marzo del 2015, un aviso promocional en el blog oficial de Hope Funds, blog.hopefunds.com, dejaba saber que Proenter e Ilmen forman parte del “Grupo Hope Funds” que maneja el fondo inversor. “Poseemos una importante plataforma de inversión. Una de las alternativas que ofrecemos se concentra en el rubro de entretenimiento, abarcando la realización de eventos, adquisición de derechos deportivos, licencias de marca y de merchandising, como así también en el rubro artístico y gastronómico. Además participamos en la producción de contenidos audiovisuales de calidad internacional. Las empresas de este rubro pertenecientes al grupo Hope Funds son: Pro Enter, para sus productos Sociedad Expansiva, dedicada a la explotación de los derechos comerciales de organizaciones e instituciones deportivas y culturales; Ideas Sport e Ilmen, empresa responsable de la comercialización de las licencias del club Boca Juniors”, dice el anuncio. El acuerdo duró hasta mediados del año pasado, cuando el club dejó de tercerizar la comercilización de sus licencias.

En ese tiempo Andrés Ibarra, Presidente de Marketing de Boca, era el máximo responsable de los negocios con Ilmen y Proenter. Ibarra, el ex gerente de Socma, Sideco, Correo Argentino y Autopistas del Sol del grupo Macri, ex polifuncionario del gobierno porteño bajo la jefatura de Mauricio Macri, había sido llevado a Boca en 2004 por el propio Macri, entonces presidente del club, para ocupar la gerencia general. En 2006 Ibarra llevó a Boca como jefe de Seguridad a Jorge “El Fino” Palacios, el ex comisario procesado por encubrimiento en la cuasa AMIA y primer jefe de la Policía Metropolitana creada por Macri. Casi al mismo tiemo fue acusado de llevar al espía Ciro James al Ministerio de Educación, donde Ibarra ocupaba una subsecretaría cuando fue contratado en esa dependencia el espía procesado junto a Palacios por escuchas ilegales. Tras su paso por la gerencia de Boca, Ibarra ascendió a la comisión directiva integrando listas del oficiaismo en sucesivas elecciones internas, desde donde se adueñó de la titularidad de la Comisión de Marketing con el aval del hoy presidente del Daniel Angelici, sindicado por Lilita Carrió como el operador judicial de Macri y del entonces tesorero Orlando Salvestrini, otro ex gerente del grupo Macri y a la vez ex presidente de Boca Crece SA, la empresa que manejó el merchandising en Boca hasta la llegada de Proenter. Aunque ocupó varios puestos importantes en el Gobierno de la Ciudad, de subsecretario a ministro, Ibarra siempre mantuvo la presidencia de Marketing en Boca, cuenta Jaime Rosemberg en un artículo del diario La Nación publicado en 2013. “Modificaron el estatuto para que con las firmas de Macri y la de él (Ibarra) se pudiera aprobar casi cualquier cosa”, lo criticó en ese texto el sindicalista y dirigente boquense opositor Roberto Digón, quien también le endilgó a Ibarra el manejo de la barrabrava.

Aunque la publicidad del merchandising de Boca sigue figurando de manera prominente y reiterada en la página web de Proenter (Pro-enter.com), la relación entre la empresa y el club habría terminado a mediados del año pasado, cuando Boca dejó de tercerizar y asumió la comercialización de sus licencias. “Las principales marcas deportivas de nuestro país nos eligen para el desarrollo de sus licencias de merchandising. En Argentina Boca Juniors representa el 70 por ciento del mercado en licencias deportivas”, destaca Pro-enter. (También dice representar a Newell’s Old Boys, Unión de Santa Fe, Los Pumas, los All Blacks, los Springbocks, las selecciones argentinas de voley y de básquet, los principales equipos de fútbol de Brasil, el campeoato argentino de Rally, las carreras de ciclismo La Doble Bragado y la Vuelta de San Luis, y los dibujos animados de Los Simpson, entre otras marcas, aunque varios de esos contratos también habrían caducado.) Por esa época empezaron a conocerse las denuncias en contra de Hope Funds. Por esa época también Ibarra dejó el club para encargarse de coordinar la campaña presidencial de Macri junto a Marcos Peña y Horacio Rodríguez Larreta.

Proenter (Pro Entertainment S.A.) es un desprendimiento de la empresa TyC Sports fundada en los 90 por Carlos Avila, que arrancó en las oficinas de esa productora en la calle Balcarce y luego se mudó al edificio de DirectTV en la calle Marcelo T. de Alvear. Se trata de una sociedad entre el ex directivo de Torneos Javier Schmidt, CEO de la empresa, y su vicepresidente Eduardo Avila, hijo de Carlos. Schmidt y Avila a su vez son los apoderados de la offshore Gudere, por la cual han canalizado algunos negocios con empresas extranjeras, evitando que ese dinero ingrese al país. Según el sitio Opencorporates.com, otra empresa con el nombre Gudere, pero Holdings en vez de S.A., figura inscripta en el paraíso fscal de Panamá.

Además de Proenter e Ilmen, las otras dos empresas enumeradas como parte del “Grupo Hope Funds” por el grupo inversor son Sociedad Expansiva e Ideas Sports. Sociedad Expansiva S.A. tiene los mismos directores y el mismo domicilio que Proenter, Proenter Holdings e Ilmen (Schmidt, Avila, Sebastián Roca y Hernán García) y concentraría los negocios del grupo con la Confederación Argentina de Básquet y las selecciones de ese deporte. La otra empresa Ideas Sports, ubicada en la sede de la Productora Ideas del Sur en la calle Olleros, es presidida por Fabián Scoltore, mano derecha de Marcelo Tinelli, y estaría a cargo de los negocios con el voley. Existe una tercera empresa, Pro IDS (IDS por Ideas Del Sur), en la que comparten directorio Schmidt, Roca y García con Scoltore, Tinelli y su hija Micaela. Según varias fuentes públicas, la mitad de esa empresa pertenece a Tinelli-Scoltore y la otra a Proenter.

Según un artículo del 2 de diciembre del 2013 de Cancha Llena, el portal de deportes de Lanacion.com, el seleccionado argentino de vóleibol “es manejado comercialmente por Proenter, que posee cuatro accionistas: Javier Schmidt, Marcelo Tinelli, la financiera Hope Funds y Diego Avila, hijo del empresario Carlos”. En ese artículo, su autor Xavier Prieto cita al gerente de marketing de Proenter, Juan Diego García: “Marcelo tiene más interés y más incidencia que lo que parece”.

La sociedad Tinelli-Proenter tenía reservado un importante lugar en el esquema del desembarco del animador televisivo en el Fútbol Para Todos que se frustró en 2014, según dicen, por un veto de Máximo Kirchner y La Cámpora. “La nueva producción estará a cargo de una unión transitoria de empresas (UTE) registrada como Producción Deportiva (que forma la sigla Prode) y en la que IDS Sports (otra empresa de Tinelli, en sociedad con Pro Entertainment) y Torneos (firma conducida por Alejandro Burzaco) se asocian en partes iguales. De esa asociación no participará Ideas del Sur, la compañía de López”, anunciaba un artículo de José Crettaz en el diario La Nación en enero de ese año.

Según otro artículo de prensa, esta vez de Sabrina Santopinto y publicado en Infobae.com en septiembre del año pasado, una de la empresas de Tinelli-Scoltore, IDS Sports, figura en la investigación de la AFIP entre las beneficiarias de los fondos de origen dudoso aportados por Hope Funds. “Según la información aportada por la AFIP, los fondos captados fueron destinados a la inversión en emprendimientos inmobiliarios y la participación en sociedades comerciales como las firmas Imagen Deportiva SA, IDS Sports SA, Grileon SA, Vivir SA, SPES SA, Emprendimiento Recoleta, Pro Merchandising SA, Hope Funds Perú SA, New Viking Inv. Corp. y Auditorio Buenos Aires SA, entre otras”, dice el artículo, sin mencionar a Tinelli.

Blaksley, el CEO de Hope Funds, a su vez es socio en la empresa Musyka SA de Fernando Marín, otro ex Socma y actual coordinador de Fúbol Para Todos. Todos ellos, Macri, Tinelli, Marín y el presidente de Boca, Daniel Angelici, están entre los principales impulsores de la creación de una superliga profesional que concentre el negocio del fútbol entre los clubes más poderosos del país, un negocio potencialmente multimillonario. Lo que se dice un negocio Pro.

Después de los arreglos de Hope Funds con el Gobierno de la Ciudad, incuyendo la renovación express de la concesión de Buenos Aires Design a un precio de no creer, después de las promociones de Hope Funds del Gobierno de la Ciudad a través de megaeventos como la carrera entre Usain Bolt y el Metrobus, después de las inversiones en empresas Pro, incluyendo la de Tinelli; después de los negocios con Boca a través de Andrés Ibarra, la ruta Pro de los Panama Papers se pierde en medio de una constelación de personajes VIP del deporte y la farándula, clubes de campo, tango shows y bares temáticos de fama internacional.

Ya se sabe por dónde podría haber entrado y a dónde fue a parar. Ya se sabe quiénes le abrieron las puertas de Boca y del Gobierno de la Ciudad. Ya se sabe que estamos hablando de millones de dólares. Pero la duda persiste. ¿De dónde salió la plata?

Publicado en Página 12 el 29-5-16. Foto: Macri con Ibarra en la Casa Rosada

lunes, 23 de mayo de 2016

Las guaridas del rey de la esperanza------Por Santiago O´Donnell




El titular de la firma Hope Funds, investigado por lavado de dinero por la AFIP y la Justicia argentina, aparece en los Panama Papers como director, apoderado y/o beneficiario de una compleja red de empresas con sede en los paraísos fiscales de Panamá, las Islas Vírgenes Británicas y Singapur, junto a un grupo de socios o testaferros cuyo nombres se repiten en las distintas offshore y también en varias empresas del grupo inscriptas en la Argentina.

Así surge de los documentos del estudio panameño Mossack Fonseca, que detectó y analizó Página/12 en el marco de la investigación impulsada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung.

En los últimos años Hope Funds, liderada por el empresario Juan Enrique Blaksley Señorans, ha organizado y llevado adelante eventos pagos para promocionar al gobiero de la ciudad de Buenos Aires durante la gestión del hoy presidente de la Nación, Mauricio Macri, incluyendo la carrera entre el superatleta jamaiquino Usain Bolt y el Metrobus recién estrenado en el 2013, compulsa que laudó a favor del atleta el entonces jefe de gobierno en la línea de llegada. Hope Funds también ha sido beneficiada por el gobierno de la ciudad con la extensión de una concesión de una importante propiedad comercial en la exclusiva zona de Recoleta a un precio muy por debajo del mercado y sin que el expediente pase por la legislatura porteña. Además, Hope Funds realiza tareas de mercadeo para Boca Juniors, club dirigido por Daniel Angelici, predecesor de Macri en la presidencia de la institución y apuntado como el principal operador judicial del mandatario argentino. Blacksley también está asociado en una empresa con Fernando Marín, un ex directivo del grupo Socma, el holding de la familia Macri, a quien el presidente argentino designó para coordinar el multimillonario negocio del Fútbol Para Todos.

En otros negocios con otros interlocutores Hope Funds organizó la exhibición del tenista Roger Federer en el municipio de Tigre, maneja emprendimientos gastronómicos en la ciudad de Buenos Aires, emprendimientos inmobiliarios en la provincia de Buenos Aires, es auspiciante de importantes deportistas y equipos deportivos y está asociado a locales de tango en Buenos Aires y Nueva York, entre otras iniciativas comerciales que denotan un crecimiento exponencial del grupo desde su creación como fondo de inversiones en 1989.

Semejante crecimiento llamó la atencón de las autoridades. Una investigación de la AFIP reveló que el empresario no podría justificar el crecimiento de su patrimonio, ni podría demostrar el origen de los fondos que utilizó para sus inversiones.”El informe que entregó la AFIP es contundente: de los 521 clientes que tiene la empresa Hope Funds, apenas tres estaban en regla, tenían la capacidad económica suficiente para hacer una inversión y la dejaron asentada en su declaración de impuestos. Es decir que el 99,42% de los clientes violaron de una forma u otra la ley argentina, según el escrito que firmaron Jorgelina Beritich Medina, jefa de la Sección Actuaciones Judiciales de la División Penal de la AFIP; José Antonio Bilbao, titular de la Dirección de Planificación Penal de la Subdirección General de Asuntos Jurídicos, y Diego Alejandro Franco, jefe de la División Penal Tributaria,” señala una investigación de enero del año pasado del periodista Juan Graña del sitio Infobae.com.






El informe de la AFIP originó una denuncia del entonces titular de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC), Juan Carlos Gonella, en mayo del año pasado, denuncia que fue presentada en el juzgado federal de San Isidro a cargo de Sandra Arroyo Salgado, ya que Blaksley fijó su domcilio en esa localidad bonaerense. “Las operaciones de ‘Hope Funds S.A.’ indican que la firma habría recibido en mutuo la suma aproxmada de ocho millones y medio de pesos (puntualmente $8.428.123) por parte de clientes que, además de no presentar actividad económica suficiente, habrían ingresado al régimen jubilatorio, coincidentemente, en el año 2011. A lo expuesto aquí debe añadirse que en muchos casos ‘Hope Funds S.A.’ habría recibido aportes de terceros por fuera del circuito bancario regular, accediendo a la entrega de importantes sumas concentradas mediante un ùnico desembolso en efectivo”, dice la denuncia.

Según los Panama Paperes, Blaksley aparece como beneficiario de la empresa Marketsite S.A. en documentos de due diligence del estudio panameño Mossak Fonseca. Marketsite S.A., a su vez, aperece en el centro de un complejo entramado empresas radicadas en paraisos fiscales, incluyendo al menos 21 en Panamá, cinco en las Islas Vírgenes Británicas y dos en Singapur. Blaksley figuró como presidente de varias de estas empresas, hasta que a mediados de 2013 fue reemplazado por un contador de Mossak Fonseca, pasando a ser beneficiario de las mismas, en distitnas combinaciones, junto o por separado, con su socio minoritario (tres por ciento) en Hope Funds S.A., Federico Armando Dolinkue, su representante ante Mossak Fonseca, Alejandro Miguel Carozzino, y a su cuñada Verónica Inés Vega. En algunos casos también figuran como coapoderados de firmas del grupo el empresario gastronómico Emilio Lucini y el empresario del tango Juan Horacio Fabbri. Las offshore del grupo incluyen MKT Ltd., Global entertainmententerprisesLtd., Marketsite Ltd., International Entertainment Management Group Ltd., Tango Investments Trading, 10 A Office One Properties Corp, Twist Business Center Ltd., y Marketsite Real Estate ltd., entre otras. Este cronista intentó contactarse reiteradas veces con Hope Funds S.A. el viernes por la tarde durante el horario de oficina que aparece en la página web de la firma pero nadie contestó la llamada. Tampoco fue contestado un mensaje enviado esa tarde al email de contacto.

Hope Funds maneja varios negocios en la ciudad de Buenos Aires. Junto al accionista matoritario Grupo IRSA, Hope es dueño del 47 por ciento del complejo Buenos Aires Design. La concesión por veinte años del Buenos Aires Design venció el 18 de noviembre de 2012 y ese mismo mes fue renovada por el gobierno porteño hasta el 17 de noviembre de 2017, un día antes de que se cumplan los cinco años. Allí se aplicó la ley 3399, que permite al Ejecutivo ampliar la concesión por un plazo menor a los cinco años, sin necesidad de que la medida cuente con la aprobación de la Legislatura. Por esa concesión IRSA y Hope funds pagan “el irrisorio canon de 42.353 pesos mensuales”, denunció hace dos años la entonces diputada porteña Gabriela Cerruti. Los concesionarios del Buenos Aires Design subalquilan a otras empresas privadas 70 locales comerciales que se distribuyen en tres plantas, a un precio de 7000 pesos mensuales, lo que supone una recaudación por ese solo concepto que rondaría los 500 mil pesos mensuales. Además, el Buenos Aires Design, enclavado en una de las zonas turísticas más concurridas de la ciudad (lo rodean el Centro Cultural, el Cementerio de La Recoleta y Plaza Francia), cuenta con una terraza de tres mil metros cuadrados, 174 cocheras que subalquila y dos edificios anexos: el Hard Rock Café, cuya licencia argentina pertenece a Hope Funds, y un auditorio de más de dos mil metros cuadrados. Cuando se produjo la renovación express del predio el apoderado de IRSA era Augusto Rodríguez Larreta, hermano de Horacio, entonces jefe de gabinete del gobierno de la ciudad y actual jefe de gobierno porteño.

Un año después de la renovación de la licencia del Buenos Aires la ciudad recibió a tres deportistas ilustres. El 30 de noviembre del 2013 las hermanas estadounidenses Serena y Venus Williams jugaron un partido de exhibición en el Buenos Aires Lawn Tennis y el 14 de diciembre de ese año velocista y hombre record de los 100 y 200 metros llanos, Usain Bolt, corrió contra un colectivo de la línea 59 en una traza del recientemente inaugurado metrobus porteño, la obra pública más emblemática de la gestión macrista en la ciudad. Más allá de que los deportistas brindaron clinicas de tenis y atletismo en distintas las villas porteñas, los contribuyetes pagaron a través del gobiero porteño cinco millones de pesos por la presencia de estos destacados personajes, a razón de un millón para las hermanas Williams y cuatro para Bolt. Hope Funds organizó ambos eventos junto a la firma Imagen Deportiva del empresario Guillermo Marín.



Además, en una entrevista cn el diario La Nación en mayo del 2012, el propio Blaksley reveló un vínculo comercial que una a Hope Funds con el club Boca Juniors: “También somos dueños del merchandising de Boca Juniors [todo menos la camiseta y la estática], y la licencia de escuelas de fútbol. La cultura y el entretenimiento me cubren de cualquier avatar local” dijo entonces el “dueño” de Hope Funds, título con el que Blaksley figura en la página web de la firma.

Blaksley además está asociado a Fernando Marín en la empresa Musyka S.A. inscripta en la Inspección General de Justicia en ocutbre de 2013. El año pasado Hope Funds y Fernando Marín coprodujeron la obra musical “Pasos de amor, el musical de la paz”, exhibida en el teatro El Nacional de la calle Corrientes. También en la capital porteña, Blaksley, autoproclamado mecenas de las artes y los deportes, trajo en julio del 2012, a traves de Hope Funds y junto a la empresa italiana Artifex, la muestra Meraviglie dalle Marche, que reunió obras de Rafael, Tiziano y Rubens, entre otros maestros, y se expuso en el Museo Nacional de Arte Decorativo en la Avenida del Libertador, Palermo Chico. En diciembre del 2013 Hope Funds organizó la despedida del futblista Ariel “el burrito” Ortega en el Estadio Monumental. El año pasado la firma abrió una sucursal del afamado restaurante de comida peruana de alta gama La Rosa Náutica en un local de Puerto Madero.

Pero los negocios de Hope Funds en la Argentina no se limitan a la ciudad de Buenos Aires. En mayo del 2013 Hope Funds organizó una muestra de arte criollo en el Vaticano, ocasión que le valió a Blaksley una foto con el papa Francisco.







En el rubro deportivo, en junio del 2012 Hope Funds se anotó como sponsor oficial de la selección argentina de basquet después de firmar un convenio el titular de la CABB en las oficinas del fondo de inversión en Sarmiento al 600, a metros del obelisco. Tres meses más tarde Hope Funds se convirtió en el prinipal patrocinante del multicampeón equipo de polo La Dolfina, cuyo líder Adolfo Cambiaso es ampliamente considerado como el mejor polista del mundo. Dos meses después la firma contrató al tenista suizo Roger Federer, entonces número uno del mundo, para realizar una exhibición en el municipio de Tigre,evento que fue presentado enconferencia de prensa por el entonces intendente Sergio Massa. Durante el match, que también tuvo como protagonista al tenista argentino Juan Martín del Potro, una falla en la tribuna tubular montada a último momento casi causa una tragedia. En julio del 2013 Hope Funds, conjuntamente con la fundación Lionel Messi, entregó un cheque por 20,000 a Unicef después de un partido benéfico en Lima, Perú. Ese noche después del partido Blaksley se sacó una foto con el crack de Barcelona bajo las luces del Estadio Nacional, ambos rodeados por un grupo de niños que sostienen la gigantografía de un cheque representando dicha donación. Desde entonces Hope Funds ha patrocinado diversos eventos de polo, basquet, tenis y automovilismo, incluyendo la incursión del ex tenista David Nalbandian en el campeonato argentino de rally.



En el rubro gastronómico, un grupo vinculado a Hope Funds intenta abrir una sucursal del Hard Rock Cafe en Rosario, pero tras la denuncia de la PROCELAC el trámite se estancó en la legislatura de esa ciudad. Según informó Rosario/12 en junio del año pasado, un representante de la franquicia presentó un escrito ante la comisión de planeamiento de la legislatura de la ciudad argumentando que el proyecto debía ser aprobado porque detrás del emprendiiento no se encontraba la cuestionada Hope Funds sino la empresa HRC Rosario S.A. Sin embargo, el grupo de apoderados de la empresa incluye a Emilio Lucini, el mismo que aparece asociado a Blaksley en las offshore, y además está integrada por dos empress controladas por Blaksley,una de las cuales lleva el nombre de “Hope Funds Holding”.

En el rubro inmobiliario, Hope Funds desarrolló un club de campo lllamado “La Asunción” en Luján y proyecta otro emprendimiento similar llamado “Verazul” en el municipio de Pilar, hoy gobernado por el macrista Nicolás Ducoté. Además de las preguntas sobre el origen de los fondos para su desarrollo a partir de las denuncias contra Hope Funds, el proyecto “Verazul” ha sido duramente objetado por grupos ambientalistas locales. Sus representates afirman que la construcción del country en siete hectáreas de humedales a la vera del río Luján accarea serios riesgos de inundaciones para los vecinos de la zona.

Con la colaboración de Natalia Incolla Garay y la asistencia técnica de Mariano Blejman y Alexis Sarghel. Publicado en Página /12 el 22/5/2016.